Diálogos de una planta

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Esta historia que no tiene tiempo y comienza así:

En las profundidades de la Tierra, húmedas y silenciosas se encontraba adormilada una semilla recogida en ella misma arropada por la fina arena cálida. Sintiendo el amor que le trasmitía el eco de la oscuridad sin ella decidirlo, aparentemente, llegó su despertar.

Sin saber dónde procede la fuerza ni la intención, rompe transformándose en otra forma de existencia más bella y expansiva. En ese impacto de partirse sintió su primera emoción de dolor, ella sentía desaparecer, no volvería a ser como ella se había reconocido. La existencia de cada ser creado tiende a mantener su forma primogénita por mantener viva.

En ese tremendo momento encontró una amiga llamada gota de agua, que salió de su dolor, la llamó lágrima de su ser. Se acercó a ella y se dispuso a observarla, nunca había visto una sustancia tan linda, brillante, transparente, fluida, flexible…Y cuando contacto con ella, de forma muy curiosa, se introdujo dentro de ella, sin saber ni cómo ocurrió.

Pasaron unas cuantas horas, no muchas, la semilla empezó a germinar, empezaron a salirse filamentos que ni siquiera ella sabía que eran y a donde querían ir o hacer. Se preguntaba:

—¿Para qué sirve esto, que me está pasando?

Sólo observaba aquel fenómeno, que se dirigía hacia arriba como buscando algo, era un impulso muy fuerte incontrolado por ella. Cuando de repente otro nuevo dolor le alcanzó, chocó con algo que estaba por encima un tanto duro y firme, era la superficie del suelo de un pequeño bosque, desquebrajándolo y tras el esfuerzo asomó su tallo en aquel lugar, impactándole un rayo de luz, que la deslumbraba. Y dijo:

—¿Qué está ocurriendo en mí, no me reconozco?, pero soy yo la misma existencia.

La fuerza de su naturaleza por crecer era muy fuerte, y una vez que superó esa transformación de ella aceptando su nueva forma, salió victoriosa, feliz a disfrutar de ese nuevo mundo lleno de formas y colores.

Esa luz intensa del sol que no conocía, le hacía brillar sus frágiles tallos y tiernas hojas.

Era un ser muy curioso y reflexivo, en la parte inferior le salían como si fueran multitud de piernas, que la anclaban en el interior de su cobijo, sus raíces crecían y el tallo también.

Ahora empezaba a ser feliz, era más grande y podía percibir mejor las cosas que la rodeaban. Decía:

Tengo un cuerpo más hermoso y bello.

Cuando en ese mismo momento un pequeño insecto rondaba por sus todavía débiles ramas, se pronunció enfadada:

—¿Qué es esto?

—¡Me está comiendo!

Era una pequeña oruga que le llamó la atención su esplendor y quería probar si también estaba rica de sabor sus hojas, además de luminosas.

Ella, la joven planta, se extrañó de aquel ser y de lo que estaba haciendo.

Se volvió a cuestionar que estaba pasando, porqué la invadían y le modificaban su forma con lo bella que ella era.

Se puso triste hasta tal punto que empezó a encogerse cada vez más y más, hasta que todo su ser se derrumbó quedando tirada en el suelo.

La oruga cayó también y quedó enterrada en la profundidad del terreno. Sacudida por la caída. Llegó hasta las raíces y empezó a buscar salida haciendo galerías en la tierra buscado la salida a la superficie, por fin lo consiguió y pudo empezar a respirar…

Al haber hecho aquellos túneles, empezó a entrar aire fresco a las raíces y le llenaron de vida, empezó la joven planta a resucitar sin saber cómo…creando un ambiente propicio donde de nuevo se reprodujo llegando a estar más alta y resplandeciente.

La oruga se disponía a marcharse después de lo sucedido. La joven planta la llamó.

Y tuvieron una sincera conversación:

—Llegaste a mí en el caminar de mi vida, me asusté al ver que me estabas devorando, pero gracias a tus hechos, me he transformado tu pasar por mis hojas y profundidades.

—Ahora soy más hermosa que antes.

Le contestó la oruga:

—Me divertí contigo, me atrajo tu olor y belleza… para mí la vida es dejarme llevar…

La planta le contestó:

—Te he cogido cariño, ¿te puedes quedar conmigo unos días más?

La oruga le respondió:

—Estaré contigo unos tres días

Al tercer día la oruga quedó dormida plácidamente en el lecho de sus hojas.

La miraba la joven planta con tanto amor, sabiendo que ya pronto se iría de su lado.

Se conmovió y la quiso arropar doblando su hoja donde ella descansaba, acurrucándola.

Al día siguiente la hoja se había convertido en un capullo de seda donde albergaba dentro la oruga.

Al caer los primeros rayos de sol, empezó a romperse aquel embalse donde cobijaba el supuesto insecto. Cuando de repente asomó la cabeza con unas lindas antenas y posterior unas bellas alas de mariposa.

Se quedó sorprendida por la transformación de su amigo.

Eran impresionante sus colores, y dentro de ella llevaba la primera gota de su lágrima de la planta, que fue la que le hizo crecer.

Siendo testimonio del amor de los dos seres, volaba felizmente por todo el bosque.

La joven planta se convirtió en un gran helecho, donde se solían sentar los enamorados.

© Oro Ontiveros. Febrero 2024

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Su nombre está inspirado en seres andinos y refleja su esencia. Su curiosidad la llevó a explorar diversas espiritualidades y sabidurías, desde el budismo hasta las civilizaciones antiguas. Fundó la asociación «Manantial» en Granada, un espacio de crecimiento personal donde también compartió su voz en la radio. Como terapeuta y meditadora con más de 20 años de experiencia, sigue una llamada interior para crear cuentos que lleguen al alma y despierten consciencia..

7 COMENTARIOS

  1. Gracias querido amigo tus opiniones siempre tan certeras este cuento habla muchos temas de la vida y de las.seres cómo de forma diferente perciben y viven .pero el amor siempre transforma y nutre …
    Un cuento para crear diálogo de crecimiento personal en una buena tertulia y también con niños. Espero que los.lectores les llegue a lo más profundo del alma y les abra el corazón con consciencia 📨➕😄

  2. Me ha gustado, como todo se hace unión, eso es la naturaleza , la naturaleza colaborando con instinto

  3. La verdad es que no sé cómo empezar. Cuando leo un historia o un cuento cuya textura y detalles están inspirados en el poder de la naturaleza, estoy completamente convencido de que el escritor es una persona con una mentalidad pura y no contaminada por cosas nuevas. . Miren conmigo cómo el escritor demostró que el encuentro de diferentes razas es lo único que produce un cambio radical. Y un desarrollo real en nuestras vidas y en todo en este universo en general. Imagínese conmigo si esta semilla se encontrara con otra semilla. del mismo sexo, ¿cómo y cuándo se produciría el cambio? De hecho, esto nunca sucederá, pero cuando la semilla encontró una gota de agua, se produjo el saludable cambio innato: aquí ocurre el desarrollo natural, todas las cosas crecen, se vuelven más fuertes y más bellas, dan frutos y la vida continúa. Gracias, querido amigo, por esta maravillosa historia que nos envía mensajes de que la diferencia y la cooperación son un medio para el crecimiento y la prosperidad y no una causa de desacuerdo.

  4. Bueno Oro,tienes la dinámica de asistir a los que aún están en la desarmonia,seguro que estas ayudando a almas perdidas que de estas causalidades se pierden en el abismo. Es una de tantas tentaciones e informaciones que llega a tu corazon sensible amoroso y que envuelves grandes sabidurias .

  5. Las historias que nos contaban nuestras abuelas estimulaban la imaginación y tenían moraleja. Gracias Oro por rescatar este estímulo de la fantasía con tanta belleza , y armonia. Por unos momentos he sentido esas sensaciones que tan bien has transmitido en esa bella historia.

  6. Sensibilidad captas con mucha facilidad las vibraciones . La energía de una planta y la comparas con nuestra vida donde existe dolor luces y sombras . Te preguntas que me está pasando ? Para que me sirve esto ? Pronto te das cuenta que es para conectar con lo divino para transformarme y ser mas feliz . Despertar la espiritualidad

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