Criminalística # 9

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Antropología Forense


No son menos importantes en este siglo los avances en Antropología Forense, desarrollados también por otros dos granadinos, el profesor Botella (Miguel Cecilio Botella López. Profesor del Área de antropología Física. Director del laboratorio de Antropología de la Universidad de Granada, Formación en Prehistoria y Medicina. Imparte docencia en Biología, Medicina y Humanidades. Coordinador del Posgrado (Máster y Doctorado) Evolución Humana. Antropología Física y Forense. Líneas de investigación seguidas: Prehistoria, antropología Física, Antropología forense, Becas obtenidas para investigación en Francia, Kenya, México y Puerto Rico. Numerosos cursos impartidos a especialistas en México, Chile, Argentina, Brasil, Cuba, Puerto Rico. Tres libros publicados, 140 artículos científicos y capítulos de libros. En la actualidad trabaja en identificación forense humana en Ciudad Juárez, y ha realizado la identificación antropológica de personajes históricos como Cristóbal Colón, el Príncipe de Viana, el Infante D. Sancho de Castilla, San Juan de Dios y San Juan Grande.) y la profesora Alemán (Inmaculada Alemán Aguilera. Catedrática de Antropología Física. Está adscrita al Departamento de Medicina Legal, Toxicológica y Antropológica Física de la Universidad de Granada. Se licenció en Geografía e Historia, Opción Antigüedad y realizó su doctorado en el Programa: Evolución Humana Paleoantropología. Actualmente imparte docencia de Grado y Postgrado en las áreas de Arqueología, Antropología Social y Cultura, Criminología y Biología. Coordina el Máster de Antropología Física y Forense de la UGR. Su trayectoria profesional y de investigación está orientada al campo de la identificación humana. Ha desarrollado métodos de identificación específicos para la población mediterránea y coordina a numerosos investigadores que trabajan bajo este objetivo común. Los resultados obtenidos forman parte de la mayoría de las tesis doctorales dirigidas por ella; 21; y están recogidos en los protocolos nacionales de identificación humana. También se han transferido al resto de la sociedad ya que se han utilizado en peritajes antropológicos de identificación en la resolución de numerosos casos judiciales. Asimismo, se han utilizado para estudiar poblaciones pasadas, en proyectos arqueológicos nacionales e internacionales, de lo que ha formado parte. Es coautora de 3 libros, 43 artículos en revistas incluidas en el JCR, 20 en revistas especializadas del área no indexadas y 47 capítulos de libros; ha colaborado como investigadora en proyectos financiados por entidades públicas y privadas, 5 de ellos por el Ministerio de Educación y Ciencia y por la Junta de Andalucía), en materia de identificación humana mediante estudios de los huesos del pubis. Estos estudios, que primero se realizaron sobre cadáveres, posibilitando la identificación del sexo sin ningún género de duda y la determinación de la edad de los finados con un error de meses, se han ampliado a personas vivas mediante la utilización de técnicas de tomografía computarizada (TC o TAC), que permiten la imagen clara del pubis del sujeto a identificar y de esta forma, los datos sobre el sexo y la edad a partir de los 19 años.

Siguiendo con la Antropología Forense, podríamos decir que es una Ciencia Forense que permite aportar discriminación sobre los sujetos investigados, capacidad que explicábamos que no poseía ni el ADN ni la huella dactilar, característica que le confiere una gran utilidad en materia de identificación de víctimas sobre las que no existan bancos de comparación de muestras y para poner de manifiesto sus capacidades, me basaré en dos trágicos sucesos que nos ilustrarán sobra la cuestión que pretendo explicar.

En septiembre de 2001, la ciudad de Nueva York sufrió el ataque terrorista más brutal que se había llevado a cabo sobre suelo estadounidense, el conocido 11-S; consistió en un atentado de la red yihadista Al Qaeda sobre las conocidas torres gemelas de la Gran Manzana neoyorquina. El vuelo 11 de American Airlines y el vuelo 175 de United Airlines fueron los primeros en ser secuestrados yambos fueron estrellados contras las Torres Gemelas del Word Trade Center, el primero contra la Torre Norte y el segundo contra la Torre Sur. Otros dos vuelos también fueron secuestrados, un tercer avión pertenecía al vuelo 77 de American Airlines y fue empleado para ser impactado contra la fachada oeste del Pentágono, en Virginia. El cuarto avión, perteneciente al vuelo 93 de United Airlines, tenía como objetivo el Capitolio ubicado en la ciudad de Washington D.C., pero se estrelló en campo abierto cerca de Shanksville, Pensilvania.

El desplome de las torres gemelas provocó un total de 2.983 víctimas mortales y un gran shock. Los investigados americanos decidieron utilizar todo el dinero necesario para la identificación de las víctimas, optando por la entonces novedosa y más fiable técnica existente, el ADN. Fueron analizados 50.000 resto y a fecha de hoy solo han identificado 1.800 víctimas a lo largo de estos últimos años y, por desgracia, ya se prevén pocas identificaciones más.

En segundo lugar, en marzo de 2004, el ataque terrorista conocido como 11-M en la ciudad española de Madrid, consistente en una serie de ataques en cuatro trenes de la red de Cercanías de Madrid, llevados a cabo también por una célula terrorista de tipo yihadista, que sobre las 7:35 horas de la mañana, atacó con 10 explosiones simultáneas 4 trenes en la conocida estación de Atocha. Este terrible atentado se saldó con 190 víctimas mortales y se identificaron en 72 horas y el ADN se utilizó solo para confirmación de 27, siendo la eficacia y rapidez en la identificación un ejemplo para el resto de países del mundo.

Seguro que esto nos puede extrañar y nos preguntamos cual fue la causa del éxito y rapidez en la identificación de restos mortales en el atentado del 11-M; pues bien, este éxito se debe a la Unidad de Antropología Forense del Cuerpo Nacional de Policía, adscrita al Área de Técnicas Identificativas de la Comisaría General de Policía Científica, que utilizaron todas las técnicas de necroidentificación de que dispusieron, circunstanciales, dactilares, odontológicas, antropológicas etc., utilizando el ADN solo para confirmación una vez realizada una previa identificación de las víctimas.

Las técnicas de antropología Forense, aplicadas sobre restos cadavéricos, y más en concreto sobre restos óseos, nos dan información sobre la raza, sexo, edad, talla, hábitos de la víctima, fracturas sufridas por el finado, enfermedades que dejen algún resto en hueso, etc., lo que acota la identificación sobre todo cuando nos enfrentamos a identificaciones sin lista de candidatos (que si existe en los accidentes aéreos) o a poblaciones no reseñadas en bases de datos.

También quiero destacar los avances que desde el año 2015 se llevan también a cabo por parte del profesor Botella, la profesora Alemán y el Dr. Fernando Navarro en materia de identificación fácil mediante técnicas 3D, iniciadas en 1997 dentro de los proyectos de Infografía Forense ya comentados anteriormente.

Tampoco quiero olvidar avances a nivel internacional en el área de Grafística y Documentoscopia Forense, gracias a participación del ICCD (Instituto Científico de Criminalística Documental de Granada) entre los años 2013 y 2016, representado por sus miembros, los expertos Jesús Barrón Martin y Vicente Salmerón, responsables de Investigación Científica nº. 003 del Proyecto Estudio físico-químico del entrecruzamiento de trazos en coordinación con INTERPOL y la Académie Internationale des Experts en Escritura et Documents, consistente en evolución y mejora de las técnicas científicas que ponen de manifestó el entrecruzamiento de los trazos de escritura.

Los estudios se han centrado en las reacciones físico químicas producidas en las zonas de cruzamiento de las tintas.

Las hipótesis generales estudiadas y verificadas fundamentaron y demostraron que en el punto de cruce de dos líneas que utilizan diferentes tintas, hay:

  • Hipótesis 1: Reacciones químicas y físicas que dependerán de la calidad de las tintas utilizadas.
  • Hipótesis 2: El orden de inscripción de cada línea.
  • Hipótesis 3: El tiempo que separa la ejecución de dos líneas.

Estos estudios que INTERPOL en colaboración con la AIEED (Academia Internacional de Expertos en Escrituras y Documentos de Francia), academia a la que pertenecen los granadinos anteriormente citados, ha llevado a cabo, mediante un proyecto en colaboración con laboratorios de Policía Científica y expertos internacionales en Europa, Asia, África y América, la determinación de protocolos en la verificación de cruzamiento de trazos referidos a las falsedades documentales. Dicho proyecto ha sido pionero a nivel mundial y en el han trabajado conjuntamente expertos en análisis de documentos de todo el mundo, realizándose 2.880 experimentos en los que se han podido estudiar 57.600 intersecciones de trazos, constatados en 7.640 fotos. Para ello se han auxiliado de los equipos de video espectro de comparación, incluyendo el Luminisys TR del que ICCD dispone y que verifica por luminiscencia cromática, algunos de los protocolos que han sido investigados. También se han utilizado el Luminisys STM (también de la empresa francesa C&S Internationale), Docucenter Nirvis de Projectiona y VSG 6000/HS de Foster & Freeman.

© Dr. Sergio A.Fernández Moreno. Julio 2023

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Director Técnico del Laboratorio de Criminalística de la Universidad de Cádiz. Profesor Investigador del IAIC sección de Cádiz. Director de Área Industrial e Ingeniería – Codirector del Área de Estudios de Seguridad – Coordinador de las áreas de Ciencias Biológicas y Medicina Legal e Identificación y Antropología Física del Laboratorio de Criminalística de la Universidad de Cádiz. Con un amplísimo bagaje de formación, titulación e investigación. Miembro del Grupo de Investigación SEJ-541 «Retos en la Sociedad Contemporánea» Universidad de Almería. 2018. Profesor Investigador en el Área de Criminalística Forense, del Instituto Andaluz Interuniversitario de Criminología, Sección dela Universidad de Cádiz, desde 2016. Investigador del Laboratorio de Antropología de la Universidad de Granada el Área de Antropología Física y Forense, desde 2004.

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