Por Iris César Del Amo
Me cuesta esperar la intimidad, soy impaciente, la quiero ya. Necesito la certeza de una intimidad que solo se consigue a base de incertidumbres. Tras las caricias en la cara y los besos oscuros, me cuesta pensarte como a una persona desconocida. Surge fácilmente el debería: debería conocerte mejor, debería sentir más, debería echarte más de menos. En este columpio entre la intimidad más profunda y ninguna, en la tentativa y la falta de confianza, no eres la persona desconocida ni lo contrario; eres un intermedio, persona conocida con privilegios de íntimo. Me desconcierta la antítesis y tus brazos abrazándome por la espalda.
Yo la incertidumbre la llevo regular; en mi ansiedad, la inmediatez. Hace poco leí que, en esta época en que justo tenemos más comodidades, somos más infelices que nunca por la multitud de opciones y por cuestionarnos si hemos tomado la decisión correcta. Yo necesito la certeza, necesito la seguridad. En las relaciones lo siento como un must, pero eso es un ideal trastornado, eso es un orden demencial.
El amor se construye, pero en la construcción hay incertidumbre y a mí mientras me puede dar un infarto. El amor se construye y eso significa tener paciencia y pasar por todas las etapas: compartir experiencias, hablar, discutir, reír, tener conflictos, intercambiar películas y libros y música, pero también simplemente pasar, vivir, compartir la vida, la experiencia diaria, valorar la presencia de la persona y que esté ahí, verla, sentirla, acostumbrarse y dejar que esa sensación perdure a lo largo del tiempo. Siento que me repito al decirlo, pero lo que necesitamos es una constante y en la constante también está la construcción. En la presencia, en simplemente dejar pasar el tiempo, pues en la constante también está la confianza. Y de ahí, por fin, la certeza, la tranquilidad. Aprender a esperar. Aprender a confiar que todo va a estar bien. Qué difícil. Qué difícil aprender, aunque todo lo que digo suene tan bien. No doy consejos, escribo para mí, para recordármelo a mí misma. Incluso en el conocimiento, lucho, luchamos todas… SEGUIR LEYENDO
© Píkara Magazine.Enero 2024. Todos los derechos reservados.