Sinopsis:
Dedicados a la confección de prendas artesanales inmaculadamente blancas, los Fritz son una comunidad-santuario al margen de la sociedad. Pero su vida ermitaña y pacífica se viene abajo cuando, tras un incendio en el caserío en el que viven al abrigo de los montes de Irún, los bomberos hallan el cuerpo amordazado y sin vida de una chica de catorce años. A la Sección de Casos de la comisaría de la Ertzaintza no le quedará más remedio que lidiar con el hermetismo de sus miembros y las estrictas normas que se niegan a quebrantar. La oficial Lur de las Heras, una experimentada y prudente policía limitada por una enfermedad que desde hace año la atormenta, y su nueva compañera, la patrullera Maddi Blasco, una joven avispada y entusiasta, serán las encargadas de la investigación; dos mujeres valientes y sensibles que pelearán hasta el final para averiguar quién está detrás del homicidio antes de que vuelva a derramarse sangre inocente.
Tras el éxito cosechado con las novelas protagonizadas por Eider Chassereau y Jon Ander Macua, Noelia Lorenzo Pino da un salto editorial de primer orden, recalando en Plaza&Janes, con una nueva historia policial bañada de tintes sociales.
En este caso nos encontramos con Lur de las Heras, investigadora de La Sección de Casos de la Ertzaintza, y una compañera patrullera que aparece de pronto en su vida, Maddi Blasco, de manera casual, para formar un dúo que cargará sobre sus espaldas el peso específico de la novela. Un gran descubrimiento, no solo por sus caracteres contrarios pero complementarios, sino porque ambas mujeres sufren en sus carnes problemas personales, vitales, muy terrenales en los que cualquiera podría verse representado. Un acierto que nos aproxima mucho a ellas.
En cuanto a la trama, la autora nos lleva en esta ocasión a Irún y a sus alrededores, mezclando la vida urbana con la rural, pues será allí, en mitad del monte irunés donde arranca la narración, cuando un viejo caserío ardiendo deja a la luz el crimen de una muchacha de catorce años. La investigación no será una más para Lur y Maddi, entre otras cosas porque pronto se percatarán de que la víctima formaba parte de una de las familias más extrañas, y en cierto modo más atractivas, de la zona: los Fritz.
Los Fritz no son una familia al tipo, sino una especie de secta, desconectados de la vida actual, que viven sin apenas comodidades, dedicándose en cuerpo y alma a sacar adelante un negocio bastante boyante. Y hasta ahí puedo leer, porque en mi humilde opinión ir descubriendo el qué son, además del qué esconden los Fritz, es uno de los puntos fuertes de esta novela. Desde luego se nota el conocimiento, o el trabajo de investigación llevado a cabo por la autora para modelar, de una manera consistente, tanto las estructuras como el comportamiento de todos sus miembros.
Si a todo esto le añadimos un tipo con posibles, cargado de un desmedido ego, que busca una justicia que nadie le ofrece, unos vecinos ariscos y herméticos, un policía de bajos instintos y mediocre capacidad profesional, y un jefe bueno, pero un tanto paternalista, nos da como resultado una trama perfectamente cerrada, con giros inesperados, pero bien modulados para que resulten creíbles. Una historia negra de las de verdad.
En definitiva, la última novela de Noelia Lorenzo Pino, al igual que las anteriores, es una obra ágil, amena, que en todo momento aborda temas sociales, desde el punto de vista de las víctimas, pero también desde el de los investigadores, y que pone sobre la palestra un asunto un poco arrinconado en nuestra sociedad; esos grupos que todos conocemos, que hacen vida normal entre nosotros, pero que en cierto modo ignoramos, ya sea por miedo, dejadez, o por desinterés, pero que cuando son noticia por algún tema escabroso, nos empujan a la preocupación y a la opinión rápida y en ocasiones, por qué no reconocerlo, desinformada.
Los Txapela Noir deben estar tranquilos, porque el futuro está más que asegurado con obras como esta.
Autora:
Noelia Lorenzo Pino (Irun, 1978) es profesora de Corte y Confección de formación. Su carrera profesional está ligada al mundo de la moda hasta que en 2013 publica Chamusquina, su primera novela. Dos años más tarde ve la luz La sirena roja (Erein, 2015), donde nos presenta a la pareja de ertzainas Chassereau-Macua, quienes protagonizan cuatro novelas más: La chica olvidada (Erein, 2016), Corazones negros (Erein, 2018), La estrella de quince puntas (Erein, 2020) y Animales heridos (Travel Bug, 2021).
Corazones negros fue galardonada con el Premio Cubelles Noir a la mejor novela negra publicada ese año y finalista en Tenerife Noir, Salamanca Negra, Premios Novelpol, Tormo Negro y en el prestigioso Dashiell Hammett que se entrega en la Semana Negra de Gijón.
Además de novela escribe literatura infantil. Ha publicado cuatro cuentos en euskera de la colección Ane eta Moon.
© Eduardo Fernán-López