Para acabar de arreglar el asunto se presenta como testimonio, el diario de un viajero inglés, que registra durante la Navidad de 1955 una visita que Giovanni Santelia hizo a la casa de Picasso en Mougins.
En 2017 el coleccionista italiano Marcello Santelia de Salerno heredo una colección de pinturas de su padre. El problema es que en su mayoría eran de Picasso.
En 2018 decidió vender una de ellas en Dubai y tuvo que solicitar una autorización al Ministerio de Cultura italiano, que pidió una evaluación acudió al Committé Picasso, para su autentificación. Aquel día Claude Picasso se habría dignado a ir a trabajar y decidió declarar la pintura falsa. El cuadro tenía como el título “Dora Maar con cappello”
Es de suponer que el Committé retendría la obra y avisaría a la policía Italiana que acto seguido fueron requisadas otras 36 pinturas en casa del coleccionista y en base a una asesoría que concluyó que el conjunto de obras era falso se le acusó de posesión de obras falsificadas y receptación.
Esto llevó a la incautación de todas las obras, y el coleccionista fue acusado por la Fiscalía en base a una asesoría que concluyó que el conjunto de obras era falso.
Según informaba THE TELEGRAPH el pasado Un Tribunal de Roma el pasado 1 de julio , finalmente y después de 6 años, encargo a un perito la verificación de las 36 obras decomisadas.
Marcello Santelia, de 76 años es un empresario italiano con vínculos con el Reino Unido, niega rotundamente las acusaciones y sostiene que las 36 pinturas y dibujos son auténticos Picasso que heredó de su padre Giovanni, comerciante de arte y amigo del artista.
El abogado de Santelia ha dicho “Mi cliente está acusado de falsificar la obra de Picasso, pero tenemos pruebas de que estas obras son reales. Son 36 dibujos, grabados y óleos que Marcello Santelia heredó de su padre Giovanni, que era un marchante de arte que conocía a Picasso. Giovanni Santelia recibió las piezas del propio Picasso. SEGUIR LEYENDO
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